Sobre el sionismo, los judíos y Hitler según mi criterio… (04/Febrero/2’024)

Sobre el sionismo, los judíos y Hitler según mi criterio… (04/Febrero/2’024)

Imagen tomada de la página de Facebook llamada: 

Comité Por la Liberación de Palestina



Hay que diferenciar entre sionismo y judío. Que aunque pretendan hacerlo parecer lo mismo los sionistas, en realidad no es así. Hacerlo parecer igual es el sofisma de los sionistas. Los que hemos leído y estudiado la Biblia muchas veces sabemos que el sionismo no tiene nada que ver ni con el verdadero pueblo de Israel, ni con los verdaderos judíos. Israel fue el nombre que según la Biblia le puso Jehová a Jacob, quien heredó la promesa que le hicieron tanto a su padre Isaac, como a su abuelo Abraham, una promesa que ya venía desde Abel, Set, y que también recibió Noé. Sabemos que Jacob tuvo doce hijos y una hija, de la cual no se habla mucho, no obstante, de los doce hijos de Jacob la promesa hecha a Abraham pasó a Judá quien con Tamar tuvo a Pérez y que según la Biblia la promesa sigue por esta línea, y es Judá el ancestro de los verdaderos judíos, a los otros podríamos decirles levitas, o rubenitas, o gaditas, y así sucesivamente, pero los judíos nacen de Judá, no nacen ni de José, ni de Benjamín, ni de ningún otro hijo de Jacob, por ende, los verdaderos judíos nacen de Judá, trivial.


Luego, pasa el tiempo, y David hereda esta promesa, porque según la Biblia Dios conoce los corazones, y eligió a David siendo un pastor de ovejas, un tipo sencillo, no obstante, lleno de coraje y por eso leal, y porque David era descendiente directo de Judá, es decir, David era judío. Y aunque habían más ricos que David en todo el pueblo de Israel, el verdadero Israel, Jah, eligió a David por la riqueza de su espíritu, no por la que ostentaran otros materialmente. Así llega a ser David rey, y le sucede Salomón, que aunque el poder y la gloria lo enceguecieron, la promesa recayó sobre Salomón por el pacto que Dios hizo con David. Es así como sigue pasando el tiempo y llega el mesías que el sionismo actual sigue esperando, pero que sin embargo llegó hace rato, y me refiero a Jesús Cristo, el León de Judá, descendiente directo del rey David, porque tanto José y María descienden de David. No obstante, los judíos de aquel momento como religión, esperaban un mesías opulento, que le ayudara a someter al mundo entero para que le rindieran culto a Israel, pero como le dijo Cristo a Pilato, “mi reino no es de este mundo,” y hasta el Diablo le ofreció todos los reinos del mundo, porque el Diablo es el actual gobernante del mundo, el padre de la mentira y por eso este mundo es así de violento y desagradable. Cuando digo mundo no me refiero a nuestra bella Tierra con su fauna y flora, sino al sistema que la gobierna y que la destruye, porque ese es el objetivo de Satanás, por eso observamos que todos sus títeres están desesperados, pero es porque ya no le queda mucho tiempo. Entonces Satanás se equivocó con Cristo, porque ¿qué es este sistema que perdió el verdadero propósito de la vida para que Jesús lo deseara y le aceptara esta propuesta tan indecente? Seguramente pensó que la carne de Cristo era débil, e intentó sobornarlo, pero ¿qué es este sistema macabro y violento comparado con la Gloria que Jah le ofrecía sentado a su diestra en el Cielo y observando el universo en todas sus dimensiones para ser partícipe de la restauración de nuestra Tierra basada sobre la verdad y paz y amor? ¿Hasta qué punto está tan desesperado el Diablo? Podemos observarlo en los gobernantes nefastos del mundo, como Netanyahu por ejemplo, entre otros. Sin embargo, Jesús no aceptó la propuesta del padre de la mentira, no porque Dios le ofreciera más, sino, por los principios y valores morales y éticos y estéticos que muchos creen que es alguna pendejada, por amor a toda la creación que el padre de la mentira envidia y quiere gobernar a su antojo para destruirla.


Sión no es un lugar terrenal, lo fue en los tiempos de David y de Melquisedec. Sión ahora está en el Cielo, es una metáfora, es sentido figurado y no literal. La estrella de Belén era una señal de un fenómeno que ocurrió cuando nació Jesús, que los encargados de los observatorios del mundo entienden muy bien. Y que el actual mal llamado Israel tiene como símbolo que también pone en su bandera, porque dicen ser ellos los elegidos, y que al igual que los judíos de los tiempos de Cristo esperaban al mesías que los ayudara a someter a Roma. Por eso, cuando nace Jesús, Herodes ordena matar a todos los niños, porque las creencias de un pueblo hubieran derribado a Roma incluyéndolo a él, para así defender su profecía y a su mesías, sin embargo, tanto Herodes como los judíos de aquel momento malinterpretaron las profecías, porque ellos tienen una idea banal y vana sobre las riquezas del espíritu, y sobre el verdadero propósito de la vida y de la existencia. Así, de la misma manera, los que dicen ser judíos actualmente, tienen la misma idea, algunos viven convencidos de eso, pero los que mandan al sionismo desde más arriba saben que esto no es así, sin embargo lo utilizan para sus intereses personales, pero antes de tocar este tema brevemente, quiero decirles, que Israel empezó a andar por todas las naciones, por el mundo entero, y dejó de ser una nación en un territorio en concreto. Hasta los tiempos de Jesús muchos israelitas medio sabían de que tribu de Israel venían, luego, como se perdieron los árboles genealógicos, ya nadie llegó a saber de dónde carajos había salido, entonces todos empezaron a llamarse judíos, fuera de la tribu de Israel que fuera. Es de suponer o deducir que gran parte de la humanidad tiene sangre de Jacob en alguna parte de la cadena helicoidal del ADN, pero no lo saben. No obstante, a estas alturas de la vida debe de ser irrelevante en el sentido de que si tenemos sangre de Jacob o de Judá, no nos vamos a poner a buscar un territorio donde quepamos todos, y mucho menos en Palestina porque no cabríamos, porque somos colombianos, venezolanos, españoles, ingleses, alemanes, y de casi todos los países del mundo, entonces esto es ya absurdo. Sobre todo porque en Oseas 9:17 dice: “Mi Dios los rechazará porque no lo han escuchado, y llegarán a ser fugitivos entre las naciones.”


Entonces, en esta idea se basa el sionismo, es el argumento que utilizan, y es el argumento que se debe destruir, porque está basado sobre la mentira, y crean a fanáticos, que son quienes exterminan a los palestinos, es el actual Israel el mismo Diablo desesperado. Pero quién es el sionismo, el sionismo es un grupo de gente que domina parte del mundo, y aquellos que dicen ser judíos están seducidos por este grupo, el sionismo es un grupo de gente pequeño con poder político y económico, y aquellos que dicen ser judíos son millones de personas que el sionismo engaña con esta idea, no porque el sionismo esté esperando a algún mesías, no, el mesías lo está esperando ese grupo grande de gente que dice ser judía. Al sionismo como tal lo que le interesa son los recursos naturales que están en el territorio de Palestina además de su posición geográfica porque es estratégica. Al sionismo no le interesa ni la Biblia, ni Sión, ni nada, en realidad ellos no creen en eso, porque si creyeran no harían toda la barbarie que hacen. El sionismo está cegado por la avaricia y codicia y el falso poder, es el capitalismo opresor y salvaje y explotador y destructor. Fue este mismo sionismo que quizá no propició, aunque no tendría nada de raro, pero sí tengo claro que permitió que Hitler exterminara a millones de judíos. Utilizaron el odio de Hitler hacia los judíos con el objetivo de que después de asesinados millones de ellos, tener una gran excusa para crear al Estado de Israel que es el verdadero proyecto sionista, porque Hitler no estaba exterminando a los sionistas, Hitler estaba exterminando a los judíos. Al sionismo le importa un carajo los judíos, ellos tienen otras intenciones diferentes, porque ellos pudieron evitar que Hitler matara a millones y millones de judíos y no lo hicieron, bien lo entendió Hannah Arendt, ella se dio cuenta de la hipocresía sionista que seguramente muchos judíos ignoran. Y por eso aquellos que dicen ser el pueblo de Israel les cae esto que dijo Miqueas en el capítulo 3 y los versículos 9, 10, 11 y 12:


<<Oigan esto, por favor, jefes de la casa de Jacob, y ustedes, comandantes de la casa de Israel, que detestan la justicia y tuercen todo lo que está derecho, que construyen Sión con derramamiento de sangre y Jerusalén con injusticia. Sus líderes juzgan a cambio de un soborno, sus sacerdotes enseñan por un pago y sus profetas practican la adivinación por dinero. Aun así, se apoyan en Jehová y dicen: “¿Acaso no está Jehová con nosotros? A nosotros no nos caerá encima ninguna calamidad”. Así que, por culpa de ustedes, Sión será arada como un campo, Jerusalén se convertirá en montones de ruinas y la montaña de la Casa será como una colina cubierta de árboles.>>


Como decimos aquí, y como le diría Jesús a Pedro, de que más claro no canta un gallo.


Por José Antonio Támara-León.


El Escribidor de La Loma del Diamante.


De Las Águilas Doradas que irradian e inspiran Amor, Paz, Justicia y Poder.


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