Gremios de taxistas y el Paro Nacional…

                                           Gremios de taxistas y el Paro Nacional…

 

Colombia, al igual que otros países de América Latina, ha pululado la corrupción de manera descarada. Un grupo pequeño que dirige al Estado se reparte el país, se reparten los contratos con empresas hechas con el mismo dinero del Estado. Además, utilizan medios de comunicación a su favor, que desinforman a la población y se convierten en cómplices de estos mafiosos en el poder.

 

Uno de los tantos gremios golpeados por la corrupción, son los taxistas. Aquí en Colombia para obtener un taxi hay que pensar más en lo que cuesta el cupo que en lo que cuesta el vehículo, porque el cupo cuesta más que el vehículo, y si el taxi se oxida y no sirve más, se puede vender el cupo. Lo digo porque tengo familiares y amigos taxistas, por ende, comprendo el punto de vista del taxista. Además de eso el taxista paga impuestos por el vehículo, y es de cierta manera un empleo formal legalmente constituido. En ese sentido tienen razón cuando existen quizá otros medios de transportes ilegales, lo cual no juzgo, pero sí critico a los gobiernos, y este tema es algo que también el taxista entiende.

 

Existen otras plataformas como Uber o Indriver que se han convertido en la competencia ilegal de los taxistas. Sin embargo, en una sociedad que no garantiza el derecho al trabajo o a tener un empleo digno, la gente busca la manera de subsistir y evaden algunos impuestos porque este país cobra más impuestos y por eso sacan a cada rato reformas tributarias, por eso usan sus vehículos particulares para rebuscarse, asunto que los taxistas entienden, pero que el Estado debería dejar de cobrarles tantos impuestos a los taxistas. También, otra gran competencia son los mototaxistas, otro medio que la sociedad se inventó para conseguir el pan diario. En Cartagena de Indígenas, por ejemplo, existen más de 70 mil mototaxistas, cómo le quitamos a más de 70 mil familias que lleven el sustento a sus casas, primero hay que generar empleo, y que las empresas de la ciudad empiecen a contratar mano de obra local.

 

Todo este caos que genera la corrupción, que divide al taxista con los otros gremios que no están legalmente constituidos como los mototaxistas, así como también a los de Uber e Indriver, lo necesitan los gobiernos que han convertido a Colombia en un Estado mafioso, ya que ellos viven del caos, a ellos no les conviene organizar al país, porque si un país está bien organizado es difícil que lo logren manipular, en cambio un país desorganizado solamente está distraído buscando la subsistencia diaria. Sin embargo, este pueblo ha despertado más, está comprendiendo mejor la política, y es por eso que a raíz de la reforma tributaria, la cual tenía la intención de cobrar impuestos al pueblo, hizo sublevar tanto a mototaxistas, y taxistas, y a los de servicio de Uber e Indriver, porque al fin y al cabo todos pagamos impuestos de alguna u otra forma aunque se evadan otros; por eso también se sumaron al Paro Nacional que hoy exige la renuncia del presidente Iván Duque Márquez, por su manera dictatorial de tratar a la ciudadanía. Debemos unirnos todos, para que existan más garantías de empleo, y así aquel que ha tomado la opción de ser mototaxista o usar plataformas de Uber e Indriver pueda tener de cierta manera un empleo digno y permita a los taxistas también garantizar su subsistencia. Esto es un problema estructural que debemos construir mejor, todos estamos padeciendo la corrupción, y he querido sacar este tiempo y espacio para que entendamos también la posición del taxista y, al final el gobernante permite también la ilegalidad porque no es capaz de generar empleo en la población, y es la población la que en verdad encuentra soluciones a su realidad, de lo contrario, el caos sería peor.

 

Pd: El Paro sigue hoy, porque estamos cansados de tanta injusticia, estamos cansados de que unos cuantos opriman a millones de colombianos, somos más, somos el pueblo el verdadero poder. Y hoy civiles armados les dispararon a los indígenas que protestan en Cali, algunos asumen que son paramilitares quienes disparan.

 

Por José Antonio Támara León.

 

El Escribidor.