Alguien pregunta: ¿Cómo es el sexo en las personas evangélicas y Testigos de Jehová?

Más allá de que sea una pregunta seria, me parece una pregunta bastante despectiva, y que en sí encierra el mensaje de que los evangélicos y Testigos de Jehová no saben culear. Se sobrentiende y aunque no se mencione, que esta pregunta también va para los mormones. Bueno, sin ser evangélico, ni Testigo de Jehová, ni mormón, uno deduce que como cualquier otro ser humano que siente y que tiene orgasmos, que come, que caga y que mea. Es como yo ponerme a decir que los homosexuales todos son acosadores, estaría cometiendo un error, porque no todos lo son, hay también cabales, respetuosos, discretos, así como hay heterosexuales que son una partidas de acosadores, y otros que no, hay unos que tienen preferencia sexual por blancas o blancos, hay otros que tienen preferencia sexual hacia negras o negros, a otros les gustan las altas o las bajitas o las gorditas o flacas, y a otras les gusta la verga larga y gruesa, a otras les gusta larga y delgada, a otras les gusta corta y gruesa, a otras les gusta corta y delgada, como hay otras que les gustan todas, así como hay hombres que su preferencia sexual es hacia todas, blancas, negras, flacas, gordas y todo de lo que ahí se deriva. Quizás algunos les gusta culear de pie, o sentado, o acostado, o de lado, o al caballito, y todas las variedades de formas que el ser humano conciba en el acto sexual. Quizás algunas les guste chupar bastante, y a otros también les guste chupar bastante chocho, quizás hay otros que no. Quizás algunas les gusta que las pongan en cuatro, y a otros que les hagan la licuadora, o el helicóptero, o el 69 y el 99 o el 66 o el 96, o la carretilla, o el sapito, etc., etc., etc. En este mundo hay de todo, hay mundanos que son de una sola pareja, hay otros que son de muchas parejas, hay otros que no les gusta vivir ni tener parejas, en fin, ahí se desprenden variedades de asuntos.

Con lo anterior, quiero dar a entender la pregunta, que me parece burlesca, ridícula y salida de tono, porque falta el respeto a estas tendencias religiosas, y más allá de lo religioso, al ser humano como tal. Los evangélicos y Testigos de Jehová y mormones son seres humanos, no son del otro mundo, y como otro cualquier ser humano que no practique esta doctrina, quizá hayan fríos en el sexo, quizás hayan arrechas y arrechos, quizás algunos les guste experimentar cosas nuevas, quizás a otros no, también algunos nunca se casan, quizás a otros les guste el sexo oral, quizás a otros no, quizás algunas les guste que le den por el culo también, quizás a otras no, deben de tener su forma de culear como cualquier otra persona del común, como tú y como yo queridos lectores. Pero con la diferencia que lo hacen sólo con su esposo o esposa, o por lo menos los que en verdad aplican los principios y valores de la religión que profesan, y no sólo los evangélicos y Testigos de Jehová y mormones lo hacen solamente con su esposo y su esposa, también la gente del común que no profesan estas religiones, pueden ser ateas, y pueden ser los más fieles del mundo.

Es como preguntar cómo culean los comunistas o neoliberales, como culean los chinos, o japoneses, o europeos, o australianos, o las africanas, quién sabe, quizás hay unas frías, otras calientes, algunas les gustará chupar a otras no, pero a mí eso me parece una pregunta infantil, inmadura. Porque en esta vida todos tenemos sexo, o nos hemos masturbado, o nos hemos hecho un pajazo mental, cada quien tendrá su forma, su estilo, pero el amor de verdad, y el deseo de estar con una persona hace que descubramos más maneras de hacerlo, porque cuando no sentimos nada por nadie, sólo ocurre el mete y saca nomas, pero cuando sentimos mucho por una persona, el mete y saca es con amor, con dulzura, con tiempo. ¿Qué tal preguntarle a un militar cómo culea? Quién sabe, habrán algunos fríos, otros calientes, es relativo, como todo.

Espero haberme dado entender, que el mensaje haga entender que somos seres humanos todos, algunos somos fríos, otros calientes, y que somos diferentes en cuanto hacer nuestras cosas, pero sentimos, independientemente de la etnia, tendencia política o religiosa, y orientación sexual. Como seres humanos no somos un axioma que se puede generalizar partiendo de una doctrina que compartamos con miles.

De Antonio Támara León.

Escribidor y Poeta.