Dilema, que por qué no voté...

Bueno, a mí me preguntan eso, y a mí que me gustan dar explicaciones, sobre todo porque lo hago con plastilina para que la gente entienda mejor, aunque el que no quiere entender es porque no le da la gana de entender lo que quiero exponer, porque no es lo que quiere escuchar, en este caso: leer. El lenguaje es difícil, y se presta para malas interpretaciones, y para el de buen léxico: tergiversaciones. Pero como la plastilina está cara, aquí se los digo con barro, y aprovecho que es mes de Mayo, mes donde llueve.

Todos ya "sabemos" que a Quinto lo financió el clan García, de los García de Sucre que hasta acá vinieron a tener, para joder, y al parecer son específicamente de Sincelejo, tierra de parte de mis ancestros. También estuvo o está Javier Cáceres Leal, que de lealtad sólo a las mafias, así parece ser. También está la Gata, la ex del Turco y el Turco también. Entre otros mafiosos y cárteles de la contratación. Entonces, estos cárteles ya compraron la Registraduría, y no se descarta que a parte del Consejo Nacional Electoral. Sin embargo, y a pesar de tanta plata por el medio, aquí no se pierden las esperanzas. El asunto es que aquí se necesitaba un man que moviese las masas, una persona que generara voto de opinión masivo, y ni Múnera, ni Armando Córdoba tenían o tienen esa fuerza. Para tener esa fuerza, hay que ser apasionado, Múnera es un poco, pero no se le siente tanto, se le sentía más a Wilson Borja, y éste generaba más pasión, aunque la votación actual del Polo fue más que la anterior, pero también hay que mirar las épocas y el escenario de aquellos días con el de hoy, ya que hoy la gente está más despierta, por el fenómeno de la "Paz" y el fenómeno Gustavo Petro Urrego. Yo iba a votar por Múnera, después me incliné hacia Armando, después me sentí impedido, y decidí salir a votar en blanco, y luego decidí no salir a votar, porque me puse a pensar que a Múnera no se le hizo una campaña donde abundara el pendón y el afiche tanto en postes, como en carros, como en casas, como en medios tecnológicos de comunicación, como se le hizo a Quinto y a Andrés, y a Armando Córdoba tampoco, y tampoco al voto en blanco.

Las mafias trabajan fuertes amigos y amigas. Y aquí hay que copiarse el trabajo fuerte que hacen las mafias con el marketing. Y obviamente que el dinero les facilita las cosas, pero en las campañas de izquierda se muestra muchas veces la negligencia. Y aquí en Cartagena hubo negligencia y ha habido negligencia con las campañas de izquierda. Por eso me sorprende la campaña a Petro, es una campaña donde muchos le han apostado y creen que sí se puede, y creen que no es en vano y por eso Petro no se rinde, y su equipo de trabajo tampoco. Entonces aquí en Cartagena necesitamos movernos desde ya, porque para mañana es tarde, para que así Múnera o Armando Córdoba sean los próximos Alcaldes de Cartagena, y no Pedrito Pereira. Y miren que ya nos llevan ventaja. Y hay gente que me dice loco por esto, pero a mí eso me resbala, yo tengo claro que es lo que necesita esta ciudad, y me verán ustedes en un escenario más objetivo, pero todo es un proceso, y David Múnera debe volver a aspirar, y Armando también, y ojalá y trabajen en equipo, porque quien persevera alcanza, o si no pregúntenle a Quinto. Aprendamos lo bueno de las mafias.

Y por eso no voté. Porque este no iba a ser el momento en que ganaríamos, porque ni Armando ni Múnera ni el voto en blanco me convenció a mí que más o menos pienso, qué sería de las personas que no tienen capacidad de análisis, porque fue ese el que votó por Quinto.

Yo hubiera salido a votar, si aquí hubiera habido una persona que moviera las masas como Gustavo Petro. Porque personas así generan pasión, y motivan hasta el que nunca ha salido a votar. Y yo tengo derecho a quejarme, porque anteriormente he votado, y por eso mi decepción, porque aquí todo está comprado.

Álvaro Salom Becerra alguna vez envió uno de sus libros a concursar, y luego se arrepintió y dijo que había sido un error enviar a concursar uno de sus libros a un lugar donde ya se sabía cual sería la decisión de los jurados comprados y vendidos. Entonces recordé a Salom y me dije a mí mismo, que para qué iba a votar si ya a Quinto le habían comprado la alcaldía, lo único que me iba a "servir" era el papel del sufragio, pero esa no era la idea.

¡Y el 27 de Mayo sí salgo a votar por el futuro Presidente de esta República: Gustavo Petro Urrego!

De Antonio Támara León.

Escribidor.