¿Cuántas veces debe uno entender a la gente? (29/05/2’024)

¿Cuántas veces debe uno entender a la gente? (29/05/2’024)

Uno tiene la capacidad de entender a la gente todas las veces posibles. Sin embargo, hasta qué punto la gente está dispuesta a entender a uno. Si la gente tiene la misma capacidad de entendimiento que uno, entonces podrá existir una relación recíproca aunque existan diferencias, se alcanza la coexistencia, y eso llega cuando se ha madurado no físicamente, sino que intelectualmente, y no todo el mundo está preparado para entender al otro. Porque cuando alguien a primera no logra entender al otro ya hay un rechazo que puede dar indicios de discriminación. Porque aunque no lo crean, la gente que no entiende al otro tiene su toque de discriminación, y lo que le molesta del otro es lo que posiblemente tiene en sí mismo o misma.

Hay gente que no es capaz de entender cómo uno puede ser tan tolerante ante ellos, y entenderlos a ellos hace que ellos se alejen de uno, porque no son tolerantes como uno, entonces no pueden dar lo que uno da, y resulta uno culpable porque los entiende mucho. Aunque uno también tiene un límite, porque ¿cuántas veces debe uno entender a la gente? Bueno, si la gente no quiere que uno la entienda y se aleja, entonces no tiene sentido de que después regrese, porque si la gente de manera egoísta se va y luego quiere regresar, entonces llega el momento en que es bueno ya no entender más a la gente, sobre todo cuando la gente aparenta ignorarte, pero está pendiente de todo lo que haces y creen que tú no te das cuenta, porque no tienen la misma capacidad que tú, y tú tienes que entender que ellos no lo entienden. Cuando esto sucede, y cuando tú eres consciente de esto, la misma razón te debe conllevar a que con más causa y razón tú no entiendas a este tipo de gente, porque les falta coraje, y por eso no son merecedoras de que las entiendas. Tampoco se deben culpar por su falta de coraje, pero tampoco estás obligado a entender su cobardía, y no vale la pena que vuelvas a tomar la iniciativa, aunque más adelante te juzgarán, pero ya ese no es problema tuyo, la historia te absolverá por haberte liberado de un círculo vicioso y por haber servido de ejemplo.

No obstante, uno entiende que hay gente que no lo entiende. La gente toma malas decisiones creyendo que son las más correctas y se autoengañan, porque son decisiones que se ajustan a este sistema de mundo y para ellos este sistema de mundo es la única realidad posible, y según ellos están más aterrizados que uno, pero uno debe volver a pensar que hay gente que no lo entiende, y cuando llegan a entenderlo su aterrizaje es macabro y se acuerdan de uno, ¿ya para qué? Un poco retardado, ha pasado mucho tiempo. Porque a la gente que le falta coraje toma malas decisiones porque prefiere seguir otro camino que mirarte a los ojos y decirte la verdad, cuando es más fácil mirar al otro a los ojos y decirle la verdad que tomar otro camino, porque cuando se toma otro camino para evadir un desagrado que en verdad no sería desagrado porque la verdad libera al ser humano, resulta que al tomar ese otro camino llevas contigo una carga pesada que te atormenta. Lo que uno no entiende (es un decir, uno sí lo entiende) es: ¿Por qué la gente no dice la verdad para que se libere de su pesada carga? ¿Por qué será tan difícil asumir su responsabilidad como ser humano? La gente dice quererse a sí misma, pero cuando se niegan a confesar una verdad que los hará libre se aprisionan, se reprimen, se trastornan, entonces la gente en realidad no se quiere a sí misma ni quiere a nadie. Y ya no es culpa de uno que la gente quiera vivir en un infierno.

Atentamente, El Escribidor de La Loma del Diamante.