Un sueño de película… (15/04/2’024)

Un sueño de película… (15/04/2’024)

He tenido un sueño bastante nítido, y en el mismo sueño he sabido que era un sueño, y me dije a mí mismo dentro del mismo sueño que estaba bueno para escribir una novela, así como un guión. Extraño que el sueño no me mostrara el nombre de los personajes, sin embargo, en el mismo sueño me dije a mí mismo que yo se los pondría cuando despertara, aunque en un momento pensé que ya estaba despierto dentro del mismo sueño, entonces se pueden imaginar la realidad del sueño. Diría yo que cualquier director de cine o escritor envidiaría lo que he soñado, porque eso solamente se le ocurre al cerebro de uno, además que es algo que nunca he visto y leído en otro lugar, pero similar a Hollywood en un estilo criollo, y por eso mejor. No obstante, es bastante difícil su descripción, porque es un material con bastante grandeza desde una perspectiva literaria, y puede que no escriba al pie de la letra su contenido, porque rápidamente se me escapa la esencia del sueño, aunque claro tengo que el contenido del sueño es único, porque lo pensé mientras soñaba, cuando estaba dentro del sueño y tenía más consciencia del mismo porque lo estaba viviendo, y su idea es sumamente interesante. Sobre todo porque el escenario es una Cartagena, no cálida, sino que fría, entre la frialdad lúgubre de una Europa, y parte del Caribe tropical de mi ciudad natal y de las murallas de Cartagena que se entrelazan como si fueran un único lugar, un único territorio, con vestimenta conjugada, así como con edificaciones entrecruzadas, y calles de ambas partes, como si fueran una sola dimensión, o como si las dos dimensiones tuvieran la obligación de encajar, algo que el mismo sueño logra hacer de una manera increíble, por eso resulta bello.

Y ahí está la lucha de mis personajes favoritos del sueño contra una mafia. Quizá me sea más fácil hacer una reseña del sueño, ya que una reseña puede hacerme mantener la idea, que es bastante romántica, porque el protagonista no siente miedo en ningún momento y persigue un ideal, no deja claro cuál es ese ideal, aunque se sobrentiende que está del lado del bien, sin embargo, el sueño deja ver que no es un tema de drogas, aunque los enemigos del protagonista parecen estar en todos los malos negocios, droga, corrupción, contrabando. Lo que sí tiene claro el protagonista es que hay que acabar con los malos, y si atenta contra la vida de los malos es porque los malos quieren atentar contra su vida, y cuando se echa plomo con ellos es porque ellos le echan plomo a él, entonces él se defiende y no le tiembla la mano para matarlos, porque son unos desechables que no le aportan a la humanidad nada y que nunca van a cambiar, no es que el protagonista sea matón, pero no siente ningún remordimiento cuando él mismo dispara su arma, que parece un mágnum 3,57, aunque el tipo de arma es confuso, y no es que al protagonista le gusten las armas, sino que las utiliza y hasta mejor que sus enemigos que disparan por disparar, con falta de criterio y seguridad, porque el mismo protagonista les inspira respeto, aunque se atreven a intentar asesinarlo. Tiene todos sus pasos calculados, y también tiene los pasos calculados de sus enemigos que quieren entramparlo pero no pueden porque ya el personaje conoce sus trampas. Además porque el protagonista tiene a su gente que es tan inteligente como él, que parece que han sido malos o han estado en negocios ilícitos, pero al protagonista no lo persiguen por la ilegalidad, sino por otra cosa más fundamental, porque es como una piedra en el zapato para estas mafias. Y aquellos que respaldan al protagonista, también se les intuye la misma destreza de los malos, porque también han estado como los malos, en el sentido de que han hecho cosas ilícitas, sin embargo, tienen un ideal a pesar, y quieren proteger ese ideal para la tranquilidad de sus vidas, por eso apoyan al protagonista con la intención de destruir aquello para lo cual ya no quieren vivir, y tienen poder económico, y en el sueño son más pensantes que los malos, ya que están del lado del bien ahora. Hay una mujer que apoya al protagonista, y hay conversaciones en el sueño, sobre la problemática que al protagonista le sucede, parece amor, parece ser una relación sentimental, y no existe en ningún momento miedo a la muerte, porque para el protagonista sus enemigos son bastante imbéciles, aunque tiene claro que por su misma imbecilidad: peligrosos.

En el sueño hay un personaje nefasto y cobarde, no sé cómo describirlo, puede ser que la palabra “conchudo” ayude, pero ya en esta parte empieza a verse algo ilícito, es nefasto en el sentido de que es hipócrita y doble cara, y cree sentirse con autoridad, falto de lealtad y de sinceridad, el tipo solamente está para entregar una mercancía, actúa como mensajero, parece que ha estado en la vida pública, porque se observa también que actúa un ministerio. El tipo siempre que va a entregar la mercancía porque se gana un cojonón de plata y es lo único que hace dentro de la organización, nunca quiere bajarse del carro, un carro bastante lujoso, de hecho, de esos carros que utiliza la mafia, pero la mafia que tiene clase, y nunca quiere bajarse para entregarla, pero el tipo en realidad no es nada dentro de la mafia, tiene un carácter pretencioso que hasta el momento la verdadera mafia que sí es matona y corre riesgos se ha aguantado, porque el tipo parece ser un elemento importante para sus negocios, pero la mafia, es decir, la que está del lado del protagonista o le brinda protección ya está cansada de ese tipo sinvergüenza y pone cara, y el protagonista les hace ver que ese tipo no es necesario ya, ya que ellos le piden sugerencias al protagonista; y el tipo pretencioso tiene ínfulas de jefe cuando no aporta nada en realidad, no asume verdaderos riesgos y en cualquier momento se puede ir de boca, es decir, se convierte en un sapo verde y gordo y los traiciona a todos, porque el tipo no tiene claro ningún ideal y solamente le importa él más que su mujer, lo único que tiene es un poder de pretensión. Y alguna vez este tipo le dijo a su mujer que ellos, los que iban a recibir la mercancía y el mensaje eran los que tenían que bajarse del carro de ellos y recibir la mercancía y el mensaje, el mensaje que le había mandado un grande a los otros hombres, porque era el intermediario de un hombre con mucho poder, pero noble, no obstante bastante oscuro, no por la maldad, sino que por su sentido de Justicia y su manera metódica de hacer las cosas, un hombre que sentía en el sueño un sumo respeto por el protagonista principal que al igual que éste consideraba cada uno de los pasos que daba, por eso llegó hasta donde llegó, por eso era el fuerte.

Hasta que llegó el momento en que al tipo ya le darían materile, entonces iba otra vez de mensajero a entregar el asunto, y los que iban a recibirlo lo llamaron por teléfono celular, y el tipo les dijo que ellos eran los que tenían que bajarse de su carro a recibir lo que les habían mandado, en el sueño se entendía que el tipo no se quería bajar del carro para que alguna pared con ojos y oídos no observara que había entregado una mercancía a unos señores extraños porque en realidad agentes de otro país lo estaban viendo, lo que no le gustaba a estos señores era que el tipo no era capaz de asumir un mínimo riesgo y que se ganara la plata fácil y ya eso mostraba que en él no se debía seguir confiando. Lo que más rabia les daba a los señores era que el hombre cobarde les alzara la voz y hablara como si fuera el jefe sin tener los cojones para ser jefe. Así que este les insultó por celular y les dijo que ellos eran los que tenían que llegar hasta su carro a recibir lo que les traía porque él no se iba a boletear, entonces los tipos pensaron que ya no lo iban a matar como lo habían planeado cuando se bajara del carro y les entregara lo que les iba a entregar y les dijera lo que tenía que decirles, para dejarlo luego tirado en la carretera. Por eso cambiaron el plan y ellos se bajaron, el tipo se quedó en el carro, les dio lo que tenía que darles y les dijo lo que tenía que decirles a manera de insulto, entonces sacaron un arma y lo levantaron a tiro. Los agentes que estaban haciendo el seguimiento observaron y los señores sabían, pero no les importó porque tenían razones de peso para hacerlo y los agentes no movieron ni un dedo, simplemente observaron como se mata la mafia entre sí. Mataron a su futuro bocón o boqueroso.

Después de esto al protagonista principal lo empezaron a buscar para matarlo, no gente tan grande dentro de la organización, sino unos atrevidos que ni tienen el criterio para liderar nada aunque ellos estén convencidos de que sí, pero en su ignorancia. Y querían matarlo porque simbolizaba mucho para los ideales colectivos incluyendo a la mafia que se quiere retirar ya, se podría pensar que aquí ya existía una mafia dividida; y en la muralla, dentro de la muralla, por el lado donde está el boquetillo que da camino entre San Diego hacia la calle de la Serrezuela y el Cabrero, se encontró con sus enemigos, y como si el protagonista ya lo supiera se puso en la jugada y se echaron plomo y era de noche, y dentro de la muralla ya estaba oscuro, nomás se veía el candelazo de los tiros, el protagonista estaba dispuesto a eliminarlos, y en esas salió gente del protagonista de repente y lo defendieron, lo acompañaron a su casa donde estuvo con su mujer o una mujer que lo acompañaba, que parecía ser su amor, y él se quedó con uno escoltándolo, y uno de sus enemigos estaba escondido, sin embargo, el enemigo no se dio cuenta que ya había sido observado, entonces el enemigo al observar que el protagonista se estaba demorando para salir, buscó asomarse por una ventana que estaba lateralmente de la entrada de la casa, a lo que el protagonista se escondió y el escolta aprovechó para salir rápidamente por la puerta principal, y cuando el enemigo regresó hacia la puerta principal, el amigo escolta ya estaba ahí y lo levantó también a tiros. Y se fueron en un carro a resolver otro problema, el protagonista no tenía miedo, al contrario, tenía adrenalina, se sentía seguro y además, estaba seguro de que todos sus soberbios enemigos, gente del mal, quedarían eliminados, y así traería sosiego a su entorno. Yo observaba quizá como parte del suceso o como un simple espectador que dominaba el sueño y que de cierta manera controlaba el resultado del sueño, el resultado que yo quería, que era que la muerte del protagonista se evitara, y que todas esas mafias que no querían que nada cambiara fueran eliminadas, porque era lo justo.

Por José Antonio Támara-León.

El Escribidor de La Loma del Diamante.