En la milicia...

En la milicia...

Yo me fui a prestar el servicio militar el 6 de Octubre del año 2008, hasta Octubre del año 2010. Tenía 19 años de edad. 4 meses de entrenamiento en la base de Coveñas. Después, duro para el Batallón Fluvial de Infantería de Marina número 10, en Guapi Cauca, porque le decían guapistán por tanta violencia que en ese momento se vivía, no sé si ahora.

Después, con 5 meses de estar en la Infantería de Marina, nos mandaron para Pulbuza Nariño, donde nos llevaron en helicóptero. Éramos unos novatos para la boca del lobo, aunque fuimos con compañeros que nos llevaban 4 meses. Allá, íbamos a durar 3 meses, y nos metieron 4, sabroso, vivir en zozobra, con los mosquitos dándote clavo, con paludismo, sacándote gusanos del cuerpo, ese tal nuche, rodeado de puro monte y durmiendo sabroso en hamaca, en un cambuche que se mojaba cuando llovía, recuerdo que varias veces dormí mojado y con tremendo frío que no se lo deseo a nadie. Además de eso el plomo bajito. Y el agua sucia de río que a veces tocaba usar y nos daba cagalera. Tanto suspenso.

Después de eso conocí otros sectores del Cauca en su parte costera, me dio dos veces paludismo y leishmaniasis cutánea, se me bajaron las defensas y me dio un herpes soste en el rostro, ese es el virus que a uno le queda cuando le da varicela, entonces, cuando se nos bajan mucho las defensas él se manifiesta de esa manera, sin embargo, yo me sentía fuerte, a pesar. Si a uno le pagaran por eso sería rico. También recibimos hostigamientos, nos zumbaban los proyectiles de la guerrilla por arriba de la cabeza, aunque hoy quiero la Paz, porque es mejor que la guerra, la gente sufre en ella, yo vi pueblos sufriendo, y como he sido sensible, a mí me daba dolor. Y hoy, le apuesto a Gustavo Petro como Presidente para la República de Colombia, porque sigue uno creyendo y teniendo Fé.

Entonces, algunos dicen que yo no soy luchador, qué saben ellos, nada, ¿acaso porque no tengo dinero? Ningún rico ha vivido lo que uno ha vivido, de qué sirve la plata si no conoce el dolor de la vida, no valora las cosas, y algunos piensan que yo no he sufrido y que he tenido una vida sabrosa, nada, la gente no lo conoce a uno, ni lo que uno ha vivido, entonces lo señalan, lo injurian, lo calumnia, que uno es vago, que uno no hace nada por la vida, ¿qué sabe la gente de uno? Nada, la gente resulta imprudente, porque vive llena de complejos, y me fui a prestar servicio militar porque no pude ingresar a la Universidad, e ingresar a la Universidad también tiene su costo y su sacrificio, y en este país, eso no tiene mucho peso, porque aquí se valora más la corrupción, aquí hay que ser corrupto para "vivir bien", y ganar plata, porque no hay otra manera por mucho que uno se esfuerce, y todo lo que uno hace por la patria y que esta patria no valora, y lo escupen, y lo señalan y le dicen a uno perdedor, y juzgan, claro, es que uno no puede vender sus principios y valores morales y éticos para adherirse a un sistema corrupto que empobrece a los pueblos, por eso yo no puedo conseguir la plata que otros consiguen, porque yo no quiero ser ni corrupto político, ni narcotraficante, ni jíbaro, ni chanchullero, porque así esto nunca podrá cambiar.

Y después, me metí a activista, porque sentí que debía aportar algo, y quise escribir, aunque desde niño siembre me ha gustado leer y escribir, y me seguí cultivando, y me he metido en problemas, y me han amenazado, y me han cerrado las puertas de empleo, para tener un trabajo digno, y me ha tocado vivir del rebusque, y todavía dicen que uno no lucha, y lo juzgan y lo señalan, y de qué sirve todo lo que hago, si hay gente que no lo valora, y de qué me sirve esto, si en vez de enriquecerme, me empobrece más. Y para remate, apoya uno a un aspirante a la Alcaldía que resulta ser elegido y le da a uno la patada en el culo, entonces, ¿de qué sirve luchar? ¿De qué sirve hacer las cosas bien? Bueno, ahora de nada, sin embargo, nuestro nombre trasciende, y seguramente la vida me premiará, y no es mi intención demostrar suerte y éxito a nadie, pero eso llegará por añadidura, y aunque no es mi intención la vanagloria, a todos esos que hoy me señalan y juzgan y dicen que yo no lucho, recibirán un bofetón que les dará la vida por mal hablados, aunque yo sé que no tienen culpa de su falta de visión. Porque yo vivo el presente y bien, con honestidad, con proyección a un futuro glorioso, aunque hoy coma arroz con huevo y frutiño, y no viva de apariencias.

Entonces, con qué moral me buscarán los que hoy me señalan y juzgan y dicen que yo no lucho cuando no es así, con qué moral me buscarán cuando el Magnánimo me llene de gloria. Bueno, con alguna moral, porque son carapeladas, y porque carecen de honor, y son marrulleros, no obstante, a mí no me va a importar, porque soy así, y no me interesa ni el odio ni el rencor, sin embargo, existe la Justicia en mi corazón.

Pd: Porque la experiencia no se improvisa.

Atentamente: El Escribidor de La Loma del Diamante.

De Las Águilas Doradas que inspiran e irradian Amor, Luz, Justicia y Poder.