Una pregunta imprudente

Me preguntan que si soy buen lector por qué no supero lo del momento político, si la lectura me debería dar esa capacidad. Claro, la lectura me da para eso, también la observación y el análisis, ustedes se darán cuenta qué hará Duque en estos 4 años, ya le propusieron bajar el salario mínimo y quitarle impuestos a los monopolios y oligopolios, el mismo discurso de Uribe con otras palabras. Decirme que lo supere o que deje de llorar, me hace pensar que algunas personas que me comentan tienen un nimio pensar, infantil como el de mi hermanita de 7 años cuando la escucho discutir con sus amiguitas, aquí no observo argumentos maduros, sólo observo que me pongo en ridículo con personas que no tienen mucha cosa en la cabeza, pero que también me sirve de estudio para observar el pensamiento fútil y escaso de muchas personas que me rodean, así esto también me impulsa a usar o buscar otro método más pedagógico para que el lector pueda entender lo que se quiere decir con un lenguaje más sencillo. Pero bueno, yo no estoy molesto con ustedes, se les entiende y comprende, más bien, que debo mejorar mi argumento para penetrar el pensamiento de todo aquel que como porrista grita ¡Uribe! ¡Uribe!, ra ra ra, para que no caigan en ese fanatismo cegado, y así la gente no siga yendo para donde va Vicente. Será un trabajo arduo, ya que no será fácil enseñarles a las personas uribistas que ni siquiera saben qué es el uribismo, porque no existe en ningún libro como Filosofía o sistema económico y político, ya que no tiene fundamentos, ni está estructurado en ninguna parte, como sí lo están las tendencias como el conservadurismo y el liberalismo, inclusive: el comunismo.

Esto no es de momentos, como de momentos es el mundial, esto es de la vida diaria, de los recibos públicos que le llegan a usted mensualmente, y de que esos servicios sean efectivos, para que no lo vean a usted como un cliente, sino como un usuario que merece respeto. Así que esto no es de momentos, esto es de que en su barrio haya un buen alcantarillado, un buen sistema de canales pluviales, un buen sistema de transporte, un excelente servicio de seguridad, una casa cultural por lo menos, un excelente sistema educativo, una excelente generación de empleos, y magníficos mega proyectos en su barrio, porque es un derecho debido a la cantidad de impuestos que usted paga, y todo lo anterior es posible si usted ha elegido un presidente que se preocupe por el interés colectivo, no por el interés particular de los monopolios y oligopolios. Pero este presidente que usted eligió, ya le va a bajar al salario mínimo, bueno, vaya preparándose, para ver cómo usted va a extender sus gastos mensuales.

De Antonio Támara León.

Escribidor.